Como bien sabemos, en todos o casi todos los cuentos la princesa siempre corre peligro, y casualmente un hermoso príncipe aparece para salvarla.
La verdadera pregunta es, ¿por qué debe ser salvada siempre?. Aunque este no sea el tema a tratar de manera principal, si que es importante recalcar la debilidad que se le otorga a las mujeres en los cuentos.
Se les representa como seres inferiores, sin capacidades físicas o cualidades para actuar por ellas mismas sin la necesidad de un hombre, pero como ya dije anteriormente en un post, somos más fuertes y útiles de como nos pintan.
Volviendo al tema general, en los cuentos siempre se define a la princesa como una chica delgada, atractiva y con una personalidad muy dulce y alegre.
Mostrando situaciones que pueden parecer normales o románticas cuando en realidad no lo son.
La pregunta es, ¿por qué?
Recordemos, por ejemplo, el cuento de la sirenita, cómo un príncipe se enamora de una sirena por su hermosa voz.
Realmente, las sirenas, son monstruos marinos que con su canto engatusaban a los hombres para hacer que sus barcos naufragasen y así hacerlos caer en lo más profundo del océano.
También, no olvidemos el cuento de la Bella y la Bestia, en como una chica era secuestrada por una bestia y finalmente se enamora de ella.
Osea, básicamente el cuento define un secuestro y a una chica con el síndrome de Estocolmo, en el que básicamente se termina enamorando de su secuestrador.¿Me estás diciendo, que para ser perfecta, tengo que tener la piel de porcelana y una cintura que parece que no puedo respirar?
La realidad de esto, es que todas, somos hermosas teniendo cualquier tipo de cuerpo, cualquier tipo de piel, ya sea de porcelana o con arrugas.
Y qué vamos a decir del amor... Esa perfecta relación armoniosa en la que ninguna pareja discute...
Por favor, ¡que aburrida sería una relación así! Es imposible no discutir nunca con tu pareja, aunque sea por la más mínima tontería.
A lo que quiero llegar con esto, es que ni todos los príncipes son tan príncipes, ni todos los cuentos tan reales.
Nunca puedes comparar tu vida a un cuento de hadas, ya que tu vida será perfecta a tu manera, no cómo dicte un cuento, que como has podido leer y comprobar, no son lo que realmente creíamos que eran.
Y hasta aquí, la entrada de esta semana.
¡Que disfrutéis!
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